Olvidaron enviar el "Manual de Instrucciones"
- Angel Molina Mantilla

- 14 dic 2020
- 2 Min. de lectura
Actualizado: 24 ago 2021
Cada vez que recuerdo esta anécdota, no puedo dejar de esbozar una sonrisa, porque claro, la situación que se presentó fue tan graciosa que, aún hoy en día quien la escucha se lleva la mano a la frente...
Todo empezó cuando "Artefacta" nos había solicitado desarrollemos un producto que obligue a detenerse a las personas frente a sus tiendas... se nos ocurrió fabricar un semáforo y claro lo presentamos. Éste nos había quedado muy bonito y era bastante parecido a los semáforos que en aquel entonces estaban en las calles de Quito, así que luego de una pequeña selección con dos proveedores mas, se decidieron por nuestro modelo, que después de todo era nuestra propuesta. Estábamos orgullosos de nuestro modelo no solo porque estaba bien hecho, sino también porque le habíamos colocado un mecanismo interno con un pequeño motor que hacía que cambien las luces 4 segundos.... fue la sorpresa al cliente.
Fabricamos poco mas de cincuenta unidades para las diferentes tiendas que tenían en el país. Lo entregamos a tiempo, justo para una campaña que arrancaría en aquellos días. Recuerdo claramente que a pedido del cliente los empacamos individualmente y en cada caja debíamos escribir el nombre de la ciudad de destino. Terminado el trabajo, todo perfecto, incluso nos habíamos quedado con la muestra inicial para que adorne nuestras oficinas.
El motivo de este contenido viene un par de días después de la entrega, cuando el administrador del almacén de Ambato llamó para decirnos que su semáforo no funcionaba... que? pero si los habíamos revisado de uno en uno y se los enviamos probados...! pero el servicio al cliente y la garantía no pueden dejarse a un lado, por sobretodo estaba nuestro prestigio. Así que emprendimos el viaje a Ambato, mi esposa, yo y uno de los muchachos de producción. Al llegar, en efecto nos recibió el administrador y se puso de pié frente al semáforo mientras decía que desde que llegó su semáforo nunca funcionó... así que ese momento tomé el enchufe y lo conecté... et voilá! (ahí lo tienes!) funcionó...! nunca lo habían conectado...! nos hicimos tremendo viaje para enchufarlo...! y el chico que venía con nosotros dijo: "olvidamos enviar el Manual de Instrucciones..."






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